



Quitandinha 80 años
Un año antes de firmarse el final de la Segunda Guerra Mundial, se inauguró el hotel-casino Quitandinha. Unos años más tarde, acogería la Conferencia Interamericana, que siguió los intereses de los países en crear autodefensas en tratados sellados en reuniones iniciadas en otros países, a finales del siglo XIX. Así, además de las tan destacadas presencias de actores y actrices de Hollywood, los salones Quitandinha, durante los últimos 80 años, también han sido baluartes de la utopía por la paz mundial, frecuentados por artistas plásticos en realización de misión diplomática, representantes de movimientos étnico-raciales, presidentes y embajadores.
Pensar en la historia de este lugar significa revisar sus archivos, observar las contradicciones de las celebraciones de la élite, recopilar reportajes periodísticos, fotografías y, sobre todo, escudriñar sus logros artísticos. Por eso, ocupamos todo el palacio; antes de exponer obras de arte, intentamos compreender en que lugares de su espacio ya acogían exposiciones, como los espacios de los balcones, que estaban llenos de caballetes con obras de grandes artistas. Por otro lado, ¿cómo se mantiene todo limpio y organizado?
Por estas mismas salas, pasaban trabajadores y trabajadoras, músicos, chóferes y camareras. Trajimos, en archivos sonoros, los testimonios de Nelson Silvério Evangelista y de la actriz y acordeonista Adelaide Chiozzo, entre otros trabajadores que participaron en la construcción y en los eventos del Palacete. Por aquín han pasado nombres ilustres, como João Gilberto, Roberto Carlos, Jair Rodrigues y Wilson Simonal.
En 2023, Sesc Rio transformará el Quitandinha en un centro cultural, lo que nos empujará a realizar una programación regular y a recalificar las actividades culturales, comprometidas con cuestiones sociopolíticas y medioambientales. Así, la memoria del lugar nos sigue a orientar en la programación, y nos alentar para una vocación responsable, en que el arte
y la cultura estén en consonancia con las reparaciones históricas necesarias para un país multiétnico.

Video Thomas Mendel.
Fotografía Thomas Mendel, Lucas Landau.
La historia de Quitandinha tiene un toque de delirio y fantasía. Y mucho Brasil real, con sus virtudes y vicios superlativos. La historia de un ex arriero, convertido en magnate con su hotel de las mil y una noches provoca la imaginación. Reúne los ingredientes de una trama mítica, capaz de sorprender incluso cuando se cuenta repetidamente.
Si el arte decidiera revivirlo en una obra de teatro, por ejemplo, tendríamos una gran producción en dos actos.
Imaginemos una producción en el propio teatro mecanizado. En la primera parte, cientos de trabajadores en movimientos frenéticos protagonizan el ensueño en ciernes de Joaquim Rolla: una obra colosal en un Shangri-la en el trópico. El diseño sonoro reproduce la acción de palas, tractores y azadas. De fondo, las explosiones nos recuerdan que la guerra en Europa hace aún más improbable la construcción.
El escenario giratorio se mueve. En el segundo acto, la ficción se convierte en realidad. El escenario de entorno duro,
con cobertizos envueltos en una niebla de hielo seco, da espacio a relucientes decorados componemn un palacio normando. Hay quienes lo llamen del Taj Mahal de los hoteles. Salones majestuosos. Colores vibrantes nunca antes combinados en una decoración sorprendente. ¡Un deslumbre!
El mayor casino de Brasil, de las Américas, del mundo. Una babel de trajes de chaqueta y vestidos largos en bailes con mucha de champán. El sonido de las ruletas y las orquestas invade las primeras horas de la mañana en una fiesta sin fin. Alrededor del hotel, la ciudad temática, con sus pistas y parques, se expande poco a poco, mucho antes de la aparición del turismo de masas.
Desde el mezzanine, con total discreción, el visionario creador de estas escenas sigue la evolución de la historia, atento a cada detalle, seguro de que, en este espectáculo, nunca se cerraran las cortinas.
Flávio Menna Barreto


Quitandinha 80 years
Investigación y textos
Flavio Menna Barreto Neves
Design de proyectos y contenidos
Ana Cunha
Design y proyecto de la exposición
Celophane Cultural | Jefferson Duarte
Design de experiencia sonora
Objeto Sonoro | Felipe Barros e Saulo Dansa
Producción de objetos
Vlad Victorelli
Cenotecnia
Nova Dupla
Reproducción fotográfica de la colección
Levi Fanan, Manuel Águas, Mariana Rocha